Cobertura verde
Integrar es una tendencia, un concepto que está de moda, y que significa incluir un elemento que no pertenece a un lugar de tal forma que no sea extraño. Y ya sea en una casa con jardín donde se desdibujen sus propios límites o en una azotea ajardinada de un edificio de oficinas, integrar, es hacer que parezca fruto de la casualidad, como si fuera por capricho de la naturaleza, y que cada pieza encaje en su sitio. Las necesidades de humanización de los hábitats urbanos aumentan en la proporción que crece la sensibilidad en torno a la elección de una forma de vivir más saludable. Es por esta razón, por la que, tanto si queremos crear espacios naturales en medio del cemento, como si buscamos que la vivienda o el lugar de trabajo se armonice con su entorno natural, es cada vez más habitual, cubrir de verdor las superficies exteriores, tanto las verticales como las horizontales, para que así las plantas nos rodeen viviendo y trabajando con nosotros, aportando un poco más vida en nuestro día a día.
El milagro de la vida es la constante adaptación de los seres vivos a las posibilidades de su entorno. Las especies vegetales han evolucionado para desarrollarse en los entornos más propicios hasta cubrir todas las posibilidades, por lo que en nuestros días, podemos encontrar plantas que viven en desiertos, en grietas en la roca o incluso en las tejas de una casa abandonada. La vida siempre se abre camino, por difícil que éste sea y de hecho, las especies vegetales no necesitan tierra para vivir, ya que sólo la necesitan como sujeción, siempre que puedan obtener el agua y el alimento por otras vías. Como resultado del estudio biológico de las plantas se han desarrollado sistemas que permiten alojar un gran y variado tipo de especies en superficies con muy poco o nada sustrato, pero con agua y todos en nutrientes garantizados.
Intemper ha desarrollado sistemas de muros y cubiertas vegetales, que permiten crear un segmento nuevo dentro de la jardinera y el paisajismo, ya que la imaginación es el único límite a la hora de crear espacios verdes. Sea en el interior o al exterior, en la cubierta de una casa o en una terraza, en un muro o en un patio de luces, para cuestiones estéticas o de aislamiento térmico y sonoro, siempre hay la posibilidad de tapizar con plantas.
Estas soluciones resultan cada vez más económicamente viables y lo que en el pasado podía parecer un producto destinado sólo a edificios emblemáticos como sedes de multinacionales, museos, tiendas y hoteles de lujo, hoy en día y gracias a la simplificación de la tecnología, las viviendas particulares pueden disponer de jardines verticales y terrazas ajardinadas. Ahora es una opción personal de conciencia medioambiental ya que aportan un notable ahorro energético, al tiempo que revalorizan el inmueble a nivel económico y de imagen.